Las acciones de Cirsa llevan poco más de un mes en el Mercado Continuo de la bolsa española, con un comportamiento discreto, con un aumento cercano al 1%. Los analistas de Deutsche Bank han iniciado cobertura con una recomendación de compra y un precio objetivo de 22,7 euros por acción, lo que implica un potencial alcista cercano al 50%.
Cirsa ha mostrado un crecimiento sostenido del EBITDA durante 67 trimestres consecutivos, salvo durante el cierre obligado por Covid-19, en el que incluso logró mantenerse en positivo en la mayoría de los trimestres. Esto demuestra una fuerte resiliencia y capacidad de adaptación en un entorno cambiante.
El principal motor es el negocio de casinos y salas de juego, que representa el 53% del EBITDA.
La división online contribuye aproximadamente al 14%, con presencia significativa en España, Italia y Latinoamérica, siendo esta última la de mayor crecimiento y potencial de expansión futura.
Latinoamérica ya aporta cerca del 40% del EBITDA, con un crecimiento anual del 10% en la última década, y se espera que siga expandiéndose debido a la regulación en proceso y economías dinámicas.
La diversificación geográfica y de negocios ayuda a mitigar riesgos y potenciar el crecimiento.
Los analistas prevén un crecimiento medio anual del 7% en ingresos y del 8% en EBITDA entre 2024 y 2027, con una mejora en los márgenes hasta el 33%. El impulso tanto del negocio tradicional como del digital será clave en esta expansión.
Cirsa genera caja recurrente y planea invertir en adquisiciones, con una proyección de disponer de 400-500 millones de euros en los próximos tres años para estas operaciones, que se espera tengan retornos superiores al 20%.
La estrategia combina crecimiento orgánico y adquisitivo, con más de 100 posibles operaciones identificadas.
La valoración actual, con un EV/EBITDA estimado para 2025 de 6 veces, es más atractiva en comparación con sus comparables (9,4 veces). Sin embargo, el principal riesgo radica en posibles cambios regulatorios en los mercados donde opera, dado que toda su actividad está en mercados regulados.
Cirsa se presenta como una compañía con sólidas perspectivas de crecimiento, tanto en su negocio tradicional como en el online, con una posición geográfica diversificada y una estrategia de crecimiento vía inversión y adquisiciones. La valoración atractiva y el potencial de expansión en Latinoamérica y digital hacen que sea una opción interesante para inversores, siempre considerando los riesgos regulatorios inherentes a la industria del juego.